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Una quemadura es una lesión de la piel, u otro tejido, que puede estar provocada por diferentes causas:
- Agentes fÃsicos: son los más frecuentes, entre ellos destacan el fuego, todo aquello que tenga que ver con planchas, estufas, etc. y vapor o lÃquidos calientes como el aceite o el agua.
- Sustancias quÃmicas: estas suelen producir quemaduras graves, se dan por la ingestión y contacto con productos como ácidos, lejÃa, productos de limpieza u otras sustancias, alquitrán, fósforo, oxidantes, etc.
- Electricidad: se considera un factor de peligrosidad elevada. En muchas ocasiones la lesión que aparece en la piel es muy pequeña, sin embargo puede haber una importante afectación de órganos internos.
Como ya hemos comentado, la mayorÃa de las quemaduras se producen en el ámbito doméstico, por lo que es necesario tomar medidas de protección para prevenir lesiones y situaciones peligrosas, sobre todo en los niños.
Las quemaduras se clasifican por su gravedad:
- De primer grado: se consideran las menos graves, ya que afectan solamente la capa externa de la piel. Generalmente solo causan dolor leve, enrojecimiento e hinchazón.
- Las de segundo grado afectan las capas más profundas de la piel y causan ampollas y piel blanquecina, húmeda y brillante.
- Las quemaduras de tercer grado implican daños en todas las capas de la piel, mientras que las de cuarto grado podrÃan afectar las articulaciones y los huesos. Estas quemaduras se consideran emergencias médicas y solo deben tratarse en un hospital.
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A continuación te dejamos algunos consejos para evitar que se produzca este tipo de accidente:
- Reduce la temperatura del agua. Configura la temperatura del termostato del calentador de agua, lo ideal es que el agua para el baño ronde los 35 a 37 °C. Prueba la temperatura del agua del baño con la mano antes de meter a tu hijo en la bañera.
- Evita derramar sustancias calientes. No cocines, bebas, o lleves bebidas o alimentos calientes mientras sostienes a un niño. Mantén los alimentos y lÃquidos calientes lejos de los bordes de las mesas y encimeras.
- Gira las asas de las ollas y sartenes hacia la pared, nunca hacia afuera, y utiliza los quemadores traseros cuando sea posible. Nunca dejes de controlar lo que estás cocinando.
- Impide el acceso de los niños a fuentes de calor como la estufa, la chimenea, los calentadores y los radiadores. No dejes a un niño en una habitación cuando se estén usando estos objetos.
- Desenchufa la plancha para ropa o el rizador de cabello cuando no estén en uso, y guárdalos siempre fuera del  alcance de los niños.
- Prueba la temperatura de los alimentos antes de dárselos a un niño pequeño. Ten cuidado cuando calientas alimentos o lÃquidos en el microondas porque podrÃan calentarse de manera irregular. Nunca calientes el biberón de un bebé en el microondas.
- Identifica los cables y los enchufes. Cubre los enchufes que no se utilicen con una tapa de seguridad, y mantén los cables eléctricos ocultos para que los niños no los toquen ni los mastiquen.
- No manipules electrodomésticos y aparatos eléctricos con las manos mojadas. Mantenlos lejos del agua.
- No mezcles productos de limpieza ya que pueden dar lugar a gases muy tóxicos.
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