El Colegio Oficial de Farmacéuticos de Sevilla ha puesto en marcha una iniciativa pionera de apoyo a las farmacias rurales en situación especial, con la creación de una ayuda económica destinada a reforzar la sostenibilidad de estos establecimientos, que en muchos municipios representan el único acceso continuado de la población al sistema sanitario.

La medida, que cuenta con un presupuesto de 10.000€, está concebida como una herramienta de equilibrio y cohesión territorial, que permitirá subvencionar la contratación de un farmacéutico sustituto durante un máximo de tres días, facilitando el descanso, la conciliación personal y la continuidad asistencial en oficinas de farmacia que operan en contextos especialmente complejos.

Las ayudas estarán vinculadas a criterios objetivos de ruralidad, situación económica y penosidad, reconociendo así la realidad diferencial de estas boticas, que afrontan mayor dispersión geográfica, menor volumen de población, elevada carga de guardias y dificultades añadidas para la sustitución profesional.

En la provincia de Sevilla, de las 870 farmacias que conforman la red asistencial, 463 se encuentran distribuidas en los municipios sevillanos, muchas de ellas en entornos rurales donde la farmacia trasciende su función sanitaria y se convierte en un espacio de cercanía, acompañamiento y apoyo social, especialmente para personas mayores, pacientes crónicos o población vulnerable.

“Estas farmacias no solo garantizan el acceso al medicamento; sostienen un servicio esencial cuya desaparición tendría un impacto directo en la salud de la población y en la cohesión del sistema sanitario”, subraya Jaime Román, presidente del Colegio. En muchos casos, el farmacéutico rural es también referente sanitario, confidente y primer detector de situaciones de riesgo social o de salud.

Desde el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Sevilla se destaca que esta ayuda debe entenderse como una inversión estratégica en presencia territorial, fortaleza profesional y futuro de la farmacia, reforzando un modelo asistencial cercano, accesible y vertebrador del territorio.

Con esta iniciativa, que se pondrá en marcha a principios de 2026, el Colegio sevillano se sitúa a la vanguardia en la defensa activa de la farmacia rural, reivindicando su papel insustituible dentro del sistema sanitario y su contribución diaria a la equidad en el acceso a los medicamentos y la salud, vivan donde vivan los ciudadanos.