Coincidirán conmigo que “Hoy puede ser un gran día” es una de las mejores canciones del gran cantautor español Juan Manuel Serrat además de, posiblemente, una de las más optimistas. La he recordado esta tarde cuando, leyendo los informativos digitales, me topé conla siguiente noticia: “…La presidenta también se comprometió de forma muy clara a devolver la paga extra a los profesionales sanitarios del Servicio Andaluz de Salud (SAS), que tienen actualmente recortados sus sueldos al 75 por ciento de la jornada. «Vamos a mantener el compromiso de devolver la paga extra a los empleados públicos y vamos a restablecer la jornada completa a los 8.000 profesionales sanitarios», añadió” (sic). Ambas medidas, entre otras, fueron tomadas como consecuencia de la situación de crisis que asoló (¿sigue asolando?) España recientemente.
La noticia hacía referencia a unas declaraciones de la presidenta de la Junta de Andalucía, Dª Susana Díaz. De ser ciertas sus palabras, y no tengo argumentos objetivos para pensar que no lo sean, hoy puede ser un gran día. Y, parafraseando de nuevo a Serrat, “Hoy puede ser un gran díaimposible de recuperar, un ejemplar único, no lo dejes escapar”.
Insisto, “…no lo dejes escapar”.
Me alegro enormemente por los compañeros farmacéuticos y por el resto de amigos sanitarios dependientes del Servicio Andaluz de Salud, por la magnífica noticia que les ha dado la presidenta Díaz. Deseo de todo corazón que en breve les sea devuelta la paga extra y se restablezca la normalidad en forma de jornada completa, como ha dicho nuestra presidenta, cosa que no dudo. Dª Susana Díaz es lo suficientemente inteligente como para prometer sólo aquello que sabe que va a poder cumplir.
Ahora bien, como una nación del primer mundo como es la nuestra no puede darle a la máquina de fabricar dinero y tiene, además, la obligatoriedad de cumplir con los objetivos del déficit, he de suponer que la medida anunciada es consecuencia de la recuperación de la economía de nuestra región y de la menor presión presupuestaria que sufren las arcas andaluzas. O sea, se recorta cuando no hay más remedio y se adquiere el compromiso de devolver lo recortado cuando pueda ser. De ahí mi suposición sobre la recuperación económica.
Dicho esto, me asalta una gran duda. ¿Por qué si se va a devolver la paga extra de los sanitarios dependientes del Servicio Andaluz de Salud y se va a consolidar la jornada completa, se sigue recortando atrozmente en el gasto en medicamentos y se sigue asfixiando a los farmacéuticos de la región?.
Evidentemente, abonar pagas extras atrasadas a los sanitarios del Servicio Andaluz de Salud aporta circulante a la economía y alegría al consumo; precisamente lo contrario que se consigue apretando a los farmacéuticos. No sé si se han parado a pensar que la única riqueza que crean los medicamentos en Andalucía, aparte del salario de los pocos empleados que van quedando de la industria –relacionados principalmente con la visita médico-farmacéutica-, es el porcentaje de beneficio bruto de farmacias y almacenes de distribución. O sea, el 27,9 y el 7,6 por ciento respectivamente del precio del medicamento. Ese beneficio bruto mantiene las familias de los titulares, adjuntos, auxiliares y demás personas que trabajan en las farmacias, de los repartidores de las rutas y de los empleados de los almacenes, y punto. Por lo tanto, mientras mayor sea la presión sobre el gasto en medicamentos, entendible a la fuerza en época de crisis, menor será la capacidad adquisitiva de esas personas, menor será el consumo y menor riqueza se creará.
Créanme si les digo que la situación de muchos compañeros es desesperada y que es necesario tomar conciencia de que la presión económica sobre nuestro sector debe disminuir urgentemente, especialmente en este día en que van a empezar a corregirse parte de las medidas de recorte que se implantaron como consecuencia de la crisis que asoló (¿sigue asolando?) España recientemente.
Nada desearía más que oír a nuestra presidenta extender a los farmacéuticos concertados con el SAS, el anuncio realizado a los farmacéuticos contratados por el SAS. O lo que es lo mismo,comunicar un respiro en la bárbara presión a que se somete a los farmacéuticos andaluces. Acompañado, a ser posible, por una buena nueva semejante de las autoridades nacionales.
“Hoy puede ser un gran día imposible de recuperar, un ejemplar único, no lo dejes escapar”. Dedicado al Ministerio de Sanidad y a las consejerías de Salud de las Comunidades Autónomas españolas.