La maternidad es un viaje maravilloso sin duda, pero no debemos crearnos una idea demasiado «idílica» de esta etapa, mejor estar mentalizadas de los cambios, periodos de recuperación y posibles problemas que puedan surgir.

Durante el embarazo, aunque todo vaya bien, se pueden producir náuseas, aumento de peso, problemas circulatorios, estreñimientoestrías…Después del parto, la cosa empeora: puntos de sutura en lugares complicados, hemorroides, cansancio, pechos hinchados, barrigas deformadas…
En la lactancia podemos encontrarnos con grietas, dolor en las mamas, mastitis y problemas psicológicos asociados al choque de tener un bebé al que cuidar con la responsabilidad, falta de sueño, dedicación y estrés que eso conlleva.
Para colmo, son etapas en las que no es extraño encontrarnos con profesionales sanitarios que, por miedo o por desconocimiento, decidan no recomendar o prescribir tratamientos ante posibles patologías, con lo cual padecer cualquier dolencia es tremendamente duro.
Queridas amigas, es un error, desde mi punto de vista, anularse una como persona porque hayas sido o vayas a ser madre, debemos querernos y mimarnos mucho en todas estas etapas.
Dedicarnos tiempo e invertir en nosotras mismas es tan importante como cuidar a nuestro bebé, así que además de la canastilla del pequeño, es fundamental hacernos con nuestro propio “kit de supervivencia”, donde nos surtiremos de una serie de productos imprescindibles que nos permitirán prevenir o paliar algunos problemillas que puedan surgir.
En la farmacia pueden prepararte (o prepararle a alguien a quien quieras sorprender con este ingenioso regalo) una “Canastilla de la embarazada” y, además, te asesorarán y acompañarán en toda esta etapa con consejos y recomendaciones ante cualquier duda que puedas tener referente a tu hijo y a ti.
El “must have”, o los artículos imprescindibles que debe llevar esa canastilla son:
  • Medias de compresión normal ¡¡Fundamental!! Más de un 40% de las mujeres desarrollaremos algún tipo de insuficiencia venosa al final del embarazo. Las medias de compresión te ayudarán a prevenir esta patología. En la farmacia te tomaremos medidas para encontrar tu talla. Puedes elegir entre pantys de embarazada o medias largas y existe un catálogo de colores.
  • Crema o loción antiestrías que aplicaremos con un ligero pero prolongado masaje. Con este producto mejoraremos la flexibilidad de la piel y ayudaremos a que no aparezcan estrías. Una vez que aparecen es mucho más complicado eliminarlas. Además con el masaje aumentaremos la microcirculación local. Es importante que para que sea efectiva hemos de ser constantes, aplicando el producto una o dos veces al día después del baño o la ducha.
  • Cepillo dental de cerdas blandas, pasta de dientes y colutorio para encías sensibles. Con el uso de estos productos evitaremos gingivitis y sangrados de encías, mucho más frecuentes en esta etapa. ¡No olvides hacer una visita al dentista!
  • Fotoprotector solar facial. Debes adquirir un fotoprotector solar facial, en la farmacia te recomendaremos el más adecuado a tu tipo de piel. Existen con color o sin él. Es fundamental que te lo apliques cada mañana independientemente de la actividad que vayas a realizar, y reapliques si vas a exponerte al sol de forma directa. El melasma o cloasma gravídico son manchas que aparecen en la cara producto de los cambios hormonales del embarazo.
  • Sobres de glucosa para embarazadas. Si padeces náuseas, estos sobres monodosis no pueden faltar en tu bolso (siempre que no padezcas diabetes gestacional). Pregunta en tu farmacia.
  • Existen complementos alimenticios específicos para embarazo y lactancia que aportarán el suplemento de fólico y yodo que necesitas, así como DHA, omega 3 y otros componentes beneficiosos para cada etapa.
  • Crema de lanolina 100%. Si vas a dar el pecho, este producto te salvará de las temidas grietas. Puedes aplicarlo desde el inicio de la lactancia ante el menor síntoma de molestia en el pezón cuando tu bebé mama. La ventaja de este producto sobre todos los demás es que no tienes que retirarlo, el bebé puede chupar el pezón con la pomada aplicada.
Además de estos productos, en tu farmacia te pueden recomendar otros para posibles alteraciones específicas que puedan surgir. Piensa que en el farmacéutico tienes a un profesional sanitario cercano y disponible que te aconsejará, cuidará, te acompañará en esta etapa y se pondrá en contacto con otros profesionales en caso de ser necesario.
Cuídate mucho, tu bienestar se reflejará de forma directa en lo tranquilo y feliz que crezca tu bebé.

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Farmacéutica. Desarrollo de Proyectos Profesionales y Relaciones Institucionales del COF Sevilla.